Las fosas nasales o las narinas son dos cavidades separadas por un tabique y situadas en la cabeza, por encima de la cavidad bucal Constituyen el tramo inicial del aparato respiratorio, sirviendo para la entrada y salida de aire, y además contienen el órgano del olfato
Características
En los humanos el ciclo nasal es ultradiano. Los vasos sanguíneos de cada narina aumentan su tamaño hinchándose, y luego decrecen. Sólo una narina es usada a la vez, por lo que durante el curso del día se cambiarán aproximadamente cada cuatro horas
La irritación de las fosas nasales es la que desencadena el reflejo del estornudo y salen los mocos o la mucosidad
Características
En los humanos el ciclo nasal es ultradiano. Los vasos sanguíneos de cada narina aumentan su tamaño hinchándose, y luego decrecen. Sólo una narina es usada a la vez, por lo que durante el curso del día se cambiarán aproximadamente cada cuatro horas
La irritación de las fosas nasales es la que desencadena el reflejo del estornudo y salen los mocos o la mucosidad
Mucosa Las fosas nasales poseen una mucosa (membrana húmeda) con abundantes vellos (capacidad de filtrar) y glándulas (precipitar). La mucosa tiene dos tipos de células:
De forma muy elemental, diremos que esta mucosa nasal, desde un punto de vista histológico, tiene dos partes. Una parte, en contacto con el aire, es pues la parte superficial, y la denominamos epitelio. Otra parte, profunda, en contacto con el hueso, y la denominamos conjuntivo. Es en esta parte profunda o conjuntivo, donde se hallan unas glándulas, que son las responsables de la secreción del moco nasal.
- Células ciliadas y vellosas: Pituitaria Roja.
- Células nerviosas olfativas: Pituitaria Amarilla.
De forma muy elemental, diremos que esta mucosa nasal, desde un punto de vista histológico, tiene dos partes. Una parte, en contacto con el aire, es pues la parte superficial, y la denominamos epitelio. Otra parte, profunda, en contacto con el hueso, y la denominamos conjuntivo. Es en esta parte profunda o conjuntivo, donde se hallan unas glándulas, que son las responsables de la secreción del moco nasal.
funcion
La respiración nasal es el elemento básico, indispensable, pero no primordial para la vida del ser humano. Gracias a la respiración se dan las bases del intercambio gaseoso de nuestro organismo, de la vida neuronal, de la actividad hemática, y de toda una innumerable lista de funciones básicas.
El aire debe penetrar dentro de nuestro organismo y llega a los pulmones. La entrada es y debe ser a través de las fosas nasales o nariz. Cuando respiramos el aire entra por las fosas nasales orificios cubiertos de vellosidades con células que secretan mocosidad
El aire debe penetrar dentro de nuestro organismo y llega a los pulmones. La entrada es y debe ser a través de las fosas nasales o nariz. Cuando respiramos el aire entra por las fosas nasales orificios cubiertos de vellosidades con células que secretan mocosidad
Anatomía de la fosa nasal.
La nariz es la parte superficial y anterior de las fosas nasales, de naturaleza principalmente cartilaginosa y recubierta por piel, situada en nuestra cara o fascies, mientras que el resto de las fosas nasales está formado por dos cavidades óseas excavadas en el interior del cráneo y con sus paredes tapizadas internamente por mucosa. Las fosas nasales muestran dos orificios anteriores llamados narinas, situadas en la base o superficie inferior de la nariz, que representan la comunicación con el exterior para la entrada o salida de aire. Detrás de cada narina aparece un pequeño espacio llamado vestíbulo nasal cuyas paredes internas presentan unos pelos gruesos llamados vibrisas. En el límite posterior de las fosas nasales otros dos orificios llamados coanas desembocan en la rinofaringe o nasofaringe, sirviendo por lo tanto de comunicación con el resto del aparato respiratorio.[2]
[editar] Porción interna Es importante conocer como son por dentro estas fosas nasales. A grandes rasgos, solo diremos que, anatómicamente, estas fosas nasales tienen una pared medial que se denomina tabique nasal, y una pared lateral, que presenta los llamados cornetes nasales (son unas procidencias óseas). Estos cornetes nasales ofrecen una anatomía muy irregular, y es en esta pared donde hay las comunicaciones con los senos paranasales.
Para entender la necesidad de que la respiración debe ser nasal, debemos saber que estas fosas nasales, están recubiertas de una mucosa. Lo que denominamos mucosa es como un tapiz, o un velo, que se encuentra pegado al hueso, es decir, recubre todo el tabique y todas las cavidades y salientes de estas fosas nasales, así como también recubre el interior de los senos paranasales.
Fisiología
El aire, entra en las fosas nasales por la inspiración y crea una corriente hacia su interior. Esta corriente de aire, es la responsable del intercambio aéreo de los senos. Esta corriente aérea, llega a una zona muy alta dentro de estas fosas nasales, que es donde se encuentra el órgano de la olfación, así podemos tener un correcto olfato. Mientras existe esta corriente de aire, gracias al moco existente en esta mucosa este aire sufre unos cambios fundamentales.
Este aire es humidificado, así al pasar por la laringe, en su trayecto hacia los pulmones, no estropea este órgano, llegando correctamente saturado de agua. Este aire es también filtrado, dejando en la nariz o fosas nasales, todas las partículas que son dañinas a nuestra laringe, y tráquea. Este filtro puede ser, y en realidad lo es, muy útil para la prevención de alergias y procesos asmáticos. Este aire, es calentado, es decir, penetra dentro de las fosas nasales a una temperatura ambiental, la existente, que en ocasiones puede ser muy fría, y con el contacto de la mucosa, este aire adquiere la temperatura corporal que es necesaria e indispensable para que no dañe a la laringe, tráquea y pulmones. De esta forma se previenen bronquitis, y otros procesos inflamatorios o infecciosos del aparato
El aire, entra en las fosas nasales por la inspiración y crea una corriente hacia su interior. Esta corriente de aire, es la responsable del intercambio aéreo de los senos. Esta corriente aérea, llega a una zona muy alta dentro de estas fosas nasales, que es donde se encuentra el órgano de la olfación, así podemos tener un correcto olfato. Mientras existe esta corriente de aire, gracias al moco existente en esta mucosa este aire sufre unos cambios fundamentales.
Este aire es humidificado, así al pasar por la laringe, en su trayecto hacia los pulmones, no estropea este órgano, llegando correctamente saturado de agua. Este aire es también filtrado, dejando en la nariz o fosas nasales, todas las partículas que son dañinas a nuestra laringe, y tráquea. Este filtro puede ser, y en realidad lo es, muy útil para la prevención de alergias y procesos asmáticos. Este aire, es calentado, es decir, penetra dentro de las fosas nasales a una temperatura ambiental, la existente, que en ocasiones puede ser muy fría, y con el contacto de la mucosa, este aire adquiere la temperatura corporal que es necesaria e indispensable para que no dañe a la laringe, tráquea y pulmones. De esta forma se previenen bronquitis, y otros procesos inflamatorios o infecciosos del aparato